El cosecretario de la CGT y líder de Camioneros, Pablo Moyano, aseguró que el paro general anunciado por la central obrera para el próximo 9 de mayo será «masivo». Y volvió a cargar contra el gobierno de Javier Milei por ejecutar «políticas de hambre y represión» contra el pueblo argentino. «Se hace el guapo con los trabajadores y después se va al exterior y se arrodilla», disparó.
En diálogo con el programa #TeavisoconTiempo por la AM 530, Radio de las Madres, el sindicalista habló del plan de lucha de la CGT que incluye, además del paro, las marchas del 23 de abril y del 1° de mayo. Se refirió al impacto que tiene para los trabajadores la negativa del gobierno a homologar el convenio salarial de Camioneros y también a la reorganización del peronismo frente al gobierno de La Libertad Avanza.
Sobre las medidas anunciadas por la CGT, Moyano consideró que, tanto la marcha del 23 de abril, en defensa de la universidad pública, como la movilización del 1° de mayo y el segundo paro general, serán «masivos» y consideró que «la conflictividad social va a ir creciendo» porque el gobierno sigue tomando medidas “contra” la gente.
«El paro era un pedido de la gente. Creíamos que el gobierno iba a tratar de cambiar un poco el modelo económico y fue todo lo contrario. La inflación no cede, el DNU le va complicando la vida a millones de argentinos, la recesión, los aumentos de tarifas, el cierre de muchísimas pymes, la pérdida de los jubilados. Son un cúmulo de medidas que han llevado a que la CGT tenga el rol de defensa de la soberanía y de los intereses de los trabajadores», afirmó.
Aseguró que no cree en las encuestas que señalan que el gobierno mantiene el apoyo de la población porque en la calle «se ve que la bronca crece», al tiempo que calificó de «títere» a Milei. «Se hace el excéntrico o el guapo con los trabajadores, pero después se va al exterior y se arrodilla. Se arrastra con los grandes empresarios, con las grandes corporaciones, con los bancos, con el gobierno de Estados Unidos, con Donald Trump», lanzó.
Moyano también se refirió a la decisión de la Secretaría de Trabajo de Nación de no homologar el convenio paritario firmado por Camioneros que implica un incremento del 45%. Advirtió que, si no hay una solución, irán a la Justicia y tomarán medidas de fuerza. «Esto de no homologar las paritarias es de la época de la dictadura militar. En su momento, detenían, desaparecían compañeros y ni qué hablar de paritarias libres. Hay una presión muy fuerte del FMI y de los empresarios para que al ajuste lo paguen los laburantes y no los que hoy gobiernan el país y se la están llevando en pala: Paolo Roca, Mercado Libre, las multinacionales», señaló, y aseguró que Milei es «un títere» y «no tiene poder político».
Explicó que muchas empresas pagaron el incremento y otras no porque, al no estar homologado, argumentan que no pueden incluirla en los costos. En estos casos, la ponen «a cuenta» de futuros aumentos y no va al salario básico, lo que genera un perjuicio para el laburante. Aclaró que la excepción es la Provincia de Buenos Aires debido a que Axel Kicillof sí avaló la paritaria. «Los más de 20 mil trabajadores de la recolección y barrido que trabajan en los municipios de Provincia ya han cobrado el salario con aumento», afirmó.
El sindicalista también opinó que en Unión por la Patria hay un debate interno “muy importante» por ver quién conduce y por pensar qué proyectos y propuestas tiene el peronismo «para que los argentinos vuelvan a creer» en esa fuerza política. Admitió, en este sentido, que el gobierno de Alberto Fernández «fue fallido» y que «había demasiados trabajadores sin derechos».
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