Kicillof suma centralidad y apoyo político con un nuevo agrupamiento

"Cuando hablamos de unidad, debe ser unidad en la acción, en el trabajo, en lo político y en los objetivos", definió esta semana el gobernador bonaerense Axel Kicillof, al sumar a la estructura de su gabinete a un dirigente del Movimiento Evita, luego de haber incorporado unos días antes a Somos Barrios de Pie. Ajenos a las disputas tradicionales de la política, la ambición de aumentar su influencia política de Kicillof se manifiesta en la amplitud con la que está conformando su equipo de funcionarios, en el que conviven distintos sectores de Unión por la Patria, incluso aquellos que cuestionan su liderazgo. Ayer, en un acto en La Plata, su ministro de Gobierno y amigo personal, Carlos Bianco, junto a intendentes como Julio Alak, Mario Secco y Fabián Cagliardi, y una lista de dirigentes políticos, gremiales y sociales, lanzaron el Frente Popular Patria y Futuro, el primer agrupamiento que tiene una referencia directa al gobernador.

Kicillof se ha multiplicado en las últimas semanas. Además de atender las demandas de la gestión de una provincia como Buenos Aires, que requiere atención constante, el gobernador se las ha ingeniado para estar presente junto a la militancia en las calles en todas las movilizaciones importantes de los últimos tiempos, desde el 24 de marzo hasta la movilización universitaria, y la más reciente con motivo del Día del Trabajador, que culminó con un encuentro con la mesa de la CGT en la sede de Azopardo. Tanto la conducción de la CGT como Kicillof se comprometieron a hacer todo lo posible para que el Congreso rechace la ley Bases, entablando conversaciones con gobernadores y senadores.

La sensación es que ese rol de hablar con la CGT y los gobernadores, no solo los peronistas sino también los de otros espacios como Martín Llaryora, Maximiliano Pullaro o Ignacio Torres, solo Kicillof está en condiciones de llevarlo a cabo. Impulsado por el entusiasmo tras haber homologado la paritaria de Camioneros, Pablo Moyano anticipó con mucho fervor la candidatura presidencial de Axel: "Si Dios quiere, futuro presidente de la Nación". Quienes lo acompañaban aplaudieron la ocurrencia.

De esta manera, Kicillof se está perfilando cada vez más claramente como el principal opositor al gobierno de Javier Milei, tal como lo reflejan las encuestas. De manera casi natural, diferentes sectores de Unión por la Patria que estaban dispersos se están alineando bajo el ala del gobernador. Esto ocurrió con lo que el año pasado se conocía como la "mesa de Ensenada", donde coincidieron dirigentes kirchneristas que apoyaron el "operativo clamor" por la candidatura de Cristina Kirchner, un intento que luego fue frustrado. Entre otros, allí estuvieron el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés "Cuervo" Larroque, los intendentes Jorge Ferraresi y Mario Secco, y sindicalistas como Hugo Yasky y Roberto Baradel.

Sin paciencia para seguir recibiendo órdenes, estos dirigentes desafiaron las directivas de La Cámpora de Máximo Kirchner y Eduardo "Wado" de Pedro, desconfiados del ascenso de Kicillof. "¿Qué significa la conducción de Cristina? ¿Que tres tipos te manden un WhatsApp?", planteó Larroque hace un par de semanas en un acto en San Vicente, lo que generó mucha controversia. Definió al gobernador como "un fenómeno social y electoral" y afirmó que "quien conspira contra Axel está en una extraña broma". Sin rodeos, como es su estilo, Larroque dejó al descubierto la tensión que se estaba gestando en la sombra. Hubo algunas respuestas cruzadas, pero luego surgió el compromiso de no escalar la disputa.

Obsesionado con las cuestiones de gestión, Kicillof busca mostrarse siempre enfocado en los problemas de los bonaerenses y evita involucrarse en las disputas internas. Su apuesta es sumar a todos, por eso en su gabinete conviven en armonía referentes de distintos espacios de Unión por la Patria. Frente al debate público, Kicillof reaccionó de inmediato compartiendo actos con los intendentes camporistas Damián Selci y Mayra Mendoza, que actuaron con solemnidad. Luego, se multiplicó en los actos por el aniversario del triunfo electoral de Néstor Kirchner, donde regresó a Quilmes para escuchar a Cristina en su primera aparición pública, aunque ella no lo mencionó. Kicillof no pierde su rumbo. "Mantiene una relación de mucho reconocimiento y cariño hacia Cristina, eso nunca va a cambiar", comentó un miembro de su gabinete.

Desde la gobernación se alentó a principios de año la conformación de multisectoriales en cada municipio como respuesta a las políticas de ajuste decididas por el Gobierno nacional. Estas multisectoriales bonaerenses tenían a Kicillof como referencia política, aunque sin ninguna formalidad. Este sábado, en La Plata, Bianco presentó Patria y Futuro junto a Larroque y dirigentes de distinta extracción, como José María Campagnoli, Eli Gómez Alcorta, Felisa Miceli, Agustín Lecchi, Beto Pianelli y varios más. "Patria y Futuro agrupa a organizaciones del campo popular que apoyan las políticas de educación, salud, empleo y producción que llevamos adelante en la Provincia y que hoy están siendo negadas y atacadas por el gobierno nacional", explicó Bianco.

Precisamente, una decisión de Kicillof es marcar diferencias en cada una de las políticas del Gobierno nacional, como una forma de construir un perfil claro para el votante que se siente víctima del modelo libertario. En ese sentido, el ministro de Obras Públicas bonaerense, Gabriel Katopodis, propuso esta semana realizar una gran movilización al Congreso el día que se vote en el Senado la ley Bases, considerada un hito para la resistencia. "Es una ley que destruye y rompe lo mejor que tiene la Argentina. Es una ley oscura, que plantea muchos negocios fáciles para los 15 multimillonarios del país", explicó Katopodis en diálogo con El Destape Radio.

Será otra oportunidad para que Kicillof se muestre en las calles junto a la militancia liderando el rechazo a un ajuste sin precedentes, cuyas consecuencias ya están comenzando a golpear la actividad económica. "Ya estamos sufriendo una mega recesión que está afectando a la Provincia. No solo nos quitan un billón de pesos, sino que la caída de la recaudación nos golpea", explicó ayer Bianco. Frente a esto, planteó la necesidad de generar esperanza mediante una amplia coalición, teniendo al gobernador como referente. "Para mí, es con todos y todos con Axel", concluyó.